1 de mayo de 2019

Cruzando el charco: Miami

Buscaba frases célebres como título de esta entrada y ha habido una que dijo Reinaldo Arenas que me ha gustado:
" Si Cuba es el infierno, Miami es el purgatorio"

Entiendo que como crítico al Gobierno y además abiertamente homosexual en una Cuba no muy afín, Miami representó un soplo de aire fresco.

Y es que Miami tiene mucho de eso, de libertad, de mezcla de culturas y de ciudad de acogida. Con un porcentaje elevadísimo de gente de habla hispana, es una ciudad fácil de visitar y además con mucho para ver.

Imagen obtenida en Google

Lo primero sería algunos consejos prácticos si viajas a Miami:
  • La sanidad en EE.UU es cara, no dudes contratar un seguro de viajes para evitar imprevistos poco agradables. Si tienes seguro médico en tu país confirma que estás cubierto en EE.UU. y en qué condiciones y si pagas tu vuelo con tarjeta de crédito confirma también si tu tarjeta te ofrece cobertura de seguro de vida. 
  • Miami es una de las ciudades del mundo donde salen más cruceros. Si tu viaje va a continuar con un crucero, asegúrate que el seguro contratado incluya cobertura en todos los países y también en aguas por si tu mal surge mientras navegas.
  • Imprescindible tramitar el ESTA (Electronic System for Travel Authorization) desde España. Se hace a través de web, bastante sencillo y previo pago de unos 14 dolares.
  • Por si acaso recuerdo que la moneda es el dolar, vamos que tienes que cambiar antes de irte. Siempre recomendable alguna de las tarjetas gratuitas que te evitan el pago de comisiones N26 o BNEXT (esta última da problemas para pagar en USA, para sacar por cajero si que suele funcionar)
  • Miami NO es barato, como no lo es la mayoría de los EE.UU. así que tenlo en cuenta cuando hagas tu presupuesto de viaje.
  • Ten en cuenta las propinas, es un país acostumbrado a ellas y representan un % de tu cuenta, por lo tanto no las olvides.
  • Si vas a alquilar coche recuerda llevar tu carnet de conducir internacional y recuerda también no poner gasolina en la zona de South Beach puesto que es más cara.
  • La temperatura es de mucho calor en verano y recuerda que hay temporada de huracanes de julio a noviembre. La mejor época quizá sea de noviembre a mayo, pero para disfrutar de las playas quizá mejor entre mayo y junio.
  • El Aeropuerto Internacional de Miami es inmenso y además con gran número de vuelos diarios pues enlaza Europa y América Latina. Ten en cuenta este punto para ir con el tiempo suficiente para todos los trámites.
  • Quizá la mejor zona para alojarte es South Beach, pero ten cuidado porque es una zona muy animada y depende de donde elijas tu hotel, el descanso puede ser complicado. 
  • Apunta las rutas de los Citywide Free Trolley que son pequeños autobuses gratuitos que te permiten moverte por algunas de las rutas turísticas de Miami Beach. Pasan con relativa frecuencia, así que no hay problema.
  • Para moverte por Miami también dispones del Metrorail o Tren Elevado que recorre la ciudad e norte a sur con sus dos lineas (verde y naranja). La naranja conecta el aeropuerto internacional con el centro de la ciudad.
  • También para moverte tienes el Metromover, un autobús elevado que va sobre railes. Es gratuito y sólo circula por los barrios del Downtown, pero es la mejor forma de moverte por el centro.
  • Descarga la aplicación de Uber, una buena opción para moverte y saber lo que vas a gastar. El parking en Miami es complicado y caro, así que si alquilas un coche para alguna escapada más larga está bien, pero para mantenerlo para moverte por Miami no lo recomiendo.
  • Mira las excursiones que quieres hacer desde Miami y cómo hacerlas. Ir a ver los Everglades o la ruta a los Cayos de Florida son quizá las dos imprescindibles.
  • Si sólo quieres estar en Miami, con 5 o 6 días de duración es más que suficiente, por lo tanto ten en cuenta como organizar excursiones fuera o si vas con peques mirar qué sitios vas a ir a visitar que sabes que te ocuparan más tiempo.
  • Si vas a viajar con niños a Miami, te recomiendo que mires el siguiente enlace AQUÍ. Es una ciudad con muchísimas ideas para niños y con varias actividades que puedes combinar con las visitas que quizá sean menos interesante para ellos.
Después de esta pequeña compilación de datos que creo que pueden ser útiles, ya sólo queda ir al aeropuerto y coger el avión.
Si viajas con un peque y la previsión es de unas cuantas horas la primera recomendación es "darle caña" para que haya disfrutado lo suficiente como para que el rollo del embarque y la espera hasta que pueda quitarse el cinturón no sea una tortura.


Correr por la cinta transportadora, llevar su maleta como "los grandes", los propios columpios que hay en algunas zonas del aeropuerto (en el de Barcelona hay algunas), ver como llegan y salen los aviones,  el rato del desayuno divertido o lo que podáis inventar para vuestro peque.


Para el avión os recomiendo variedad si vais a estar muchas horas y queréis evitar que se enganche a una pantalla: coches para jugar, algún puzzle pequeño, pequeños juegos de viaje magnéticos (en mi caso hay uno de Tiger que es una especie de bingo con animales que es magnético y va de fábula), algunos cuentos pequeños, colores y papel, los auriculares para poder escuchar música en el despegue, y nuevamente imaginación al poder. En nuestro caso Martí es un buen viajero, así que lo del avión lo disfruta y se duerme sin problema, además luego es una gozada eso de ir pasillo arriba y abajo mirando las caras de la gente :-)


Ya sólo me queda dejaros las zonas que visitamos que podéis encontrar en cada una de estas entradas que vienen a continuación. Seguro que hay mucas más opciones, pero siempre se ha de dejar alguna para tener la excusa para volver. También he de dar las gracias a mi querida Melanie, tener a una local-adoptada que te enseña, te acompaña y además que siempre es un gustazo su compañía, es algo que no todos pueden tener. (Gràcies bonica per estar per nosaltres, amb ganes de tornar-te a veure aviat!!!)

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