Miami : South Beach i Ocean Drive

Si pensamos en Miami seguro que nos viene alguna imagen del barrio más famoso y televisivo de la ciudad. South Beach es el lugar para ver y ser visto, la postal típica de Miami e icono de todo Florida. La playa más concurrida y famosa de la ciudad está aquí y vive las 24 horas pues por la noche los locales de moda están en esta zona y si te acercas a ellos te topas con el lujo y la fiesta que hace famosa Miami.

Playa surfera, las famosas casetas de los vigilantes de la playa (vale, quien tenga menos de 30 igual no sabe de lo que hablo. Pero si habéis nacido sobre el 70 para adelante no me podéis decir que no visteis a esas cuerpos de chicas y chicos corriendo sin parar enfundados en bañadores rojos y con el salvavidas en la mano)

Esa era mi imagen forjada pero la realidad fue que no todo eran cuerpos esbeltos, que aunque hay mucho deportista y patinador/a por la playa, también hay esos cuerpos normales modelados por la cerveza y el buen comer. Total que no hace falta ser un figurín para pasearte por la zona y disfrutar de lo que ofrece.

La zona es un buen lugar para alojarte, pero también hay que considerar que es bastante ruidosa. La noche es muy animada, hay una gran concentración de hoteles, de clubs y discotecas y además es una de las zonas donde la marihuana está permitida y eso hace que exista también turismo en masa de jóvenes que en otros lugares deben cortarse del tema.

El litoral es extenso, arena blanca en una playa amplia, zonas de volei, aguas poco profundas y los famosos vigilantes (vale, no son los mimos que en la tele pero nos sirven). Los puestos de vigilancia son super coloridos y dan una imagen divertida. 

En nuestro caso repetimos en dos ocasiones en la playa y no fue la estampa más idílica puesto que la primera fue lloviendo, aunque el calorcito invitó  a alguno a bañarse; y la segunda fue con una mar lleno de sargazos que daba cierto repelús al entrar. 

Simplemente sentarte y ver a la gente ir y venir es un gusto. Y si además encuentras a los pelícanos con ganas de pescar, pues disfruta del momento.

Una recomendación que creo que puede ser interesantes es poder alquilar una bicicleta y recorrer la costa. Puedes ir incluso a la punta de la zona paseando por el Lummus Park y ver como los gigantes cruceros pasan hacia el Océano Atlántico. Podemos describir a este parque-playa como la zona más popular de South Beach y recorre por el lado de playa todo lo que sería Ocean Drive y en él encuentras todos los estereotipos que te vengan a la mente: bikinis imposibles, cuerpos de culturistas, redes de volei, palmeras a doquier, etc .Por el camino hacia la 15 encuentras alguna zona para peques donde pasar el rato y que ellos puedan disfrutar de los columpios y de algo de sombra.

Llegando a la 15 puedes ver como salen los cruceros y dar la vuelta por la calle más famosa de la zona de South Beach: Ocean Drive.

Mito de la cinematografía americana, es una de las calles escenario de películas y series como Corrupción en Miami (nuevamente los menores de 30 no sabéis de lo que hablo, pero si veis a alguien con traje blanco creerme di os digo que se inspiró en Sonny Crockett)

Una de las características de esta calle son sus edificios Art Déco y su agitada vida nocturna. Estos edificios se construyeron a comienzos del s XX. El Art Decó en Miami se identifica con edificios de colores, líneas acentuadas y estructuras sencillas. Se introdujeron coincidiendo con la Gran Depresión y era un intento de levantar el ánimo del país.

El distrito Art Decó de Miami está compuesto por más de 800 estructuras de importancia histórica, la mayoría levantadas entre 1923 y 1943. Tonos pastel, elegantes curvas, relucientes suelos de terrazo y carteles de neón.  Los llamativos colores se añadieron en los años 80 dando incluso más vida al lugar.

Si seguimos nuestra ruta nos encontramos en Ocean Drive la famosa Casa Casuarina, más conocida como Casa Versace ya que fue adquirida por el famoso diseñador y además fue aquí donde en 1997 fue asesinado. En la actualidad es un hotel muy lujoso no al abasto del bolsillo de cualquiera.

Dispones de varios lugares para comer, desde en el mismo Ocean Drive donde puedes divertirte viendo pasar a  gente y cochazos. Ojo con la cuenta pues seguro que no es lo más barato que encuentres, os dejo una cuenta a modo de ejemplo para que podáis ver algunos precios de cerveza, café y  unos platos.

Pero no todo es Ocean Drive, hay dos animadas calles paralelas a ésta y que no debes dejar de recorrer en busca de tiendas de moda, accesorios, souvenires, bares y restaurantes y algunos de los mejores clubs y discotecas de South Beach. Hablo de Collins Avenue y Washington Avenue. Nuestras grandes guías de Miami nos acompañaron en buena parte de este recorrido que hicimos en varias ocasiones, pero ninguna fue tan entrañable que la que compartimos con Melanie, Anabel y Sarah...mil gracias por vuestra compañía, alegría y por el cariño de las tres.

Algo que a mi me chocó era que a todas horas, la zona está animada. Coches descapotados con la música a disposición de todos, chicas y chicos subidos a los asientos, los bikinis servían para pasear día y para salir de noche ahora ya con tacones y maquillaje.....todo junto y sin embargo también podías encontrar lugares donde alejarte del bullicio, tomar un helado o simplemente pasear.

Si queréis ver escaparates lo recomendable es ir a Lincoln Road, una animada avenida repleta de tiendas de toda clase y terrazas para sentarte y descansar del calor. Por la noche también es un buen lugar para cenar en alguno de sus restaurantes.

Bajando rumbo sur por Collins Avenue, llegamos a Española Way, una pequeña calle peatonal, con palmeras, casas coloniales, ambiente bohemio y bastante agitado, que evoca las lejanas villas mediterráneas de la vieja Europa. Hay docenas de locales de comida española para los añorados, italiana y mexicana también.

Subimos esta agitada calle hasta Washington Avenue donde vamos hacia el sur de vuelta a nuestro hotel para descansar un poco de esta vuelta y prepararnos para la cena de esta noche con nuestras geniales guias.

Tal y como os comentaba en el post inicial de este viaje (enlace AQUÍ), otra buena manera de combinar el recorrido, es hacer tramos con el Citywide Free Trolley. Se trata de un bus gratuito que dispone de varias paradas por la zona. Simplemente pararlo y subirse si es que hay sitio :-)

Nosotros volvimos a hacer el recorrido otro día usando esta opción en  parte de él. También lo usamos en Little Havana, para mi uno de los mejores barrios que no hay que perderse de Miami y que os explico en el siguiente POST.