31 de agosto de 2015

Roadtrip de Barcelona a Croacia: Día 16 de Korcula a Dubrovnik

Empezamos el día comprando, no podemos salir de esta isla sin llevarnos provisiones de su estupendo vino Posic, así que cargamos todo el que podemos llevar y pasar por fronteras.

Una vez listo este imprescindible, cogemos el ferry hasta el puerto de Orebic y allí decidimos atravesar la isla conduciendo hasta Ston.


El paisaje está todo destrozado por un gran fuego que no debía ser muy antiguo, puesto que estaba todo quemado y con olor profundo....una autentica pena.


Una vez vas llegando a Ston, dejas atrás las cenizas para volver al verde. Ya desde el horizonte puedes ver la famosa muralla de Ston.



Se conoce como la muralla china europea, y no es de extrañar puesto que hablamos de 7 km de muralla, 5 de ellos rodean la ciudad por fuera hasta el pueblo de Mali Ston que es donde se encuentran los criaderos de mejillones y ostras, famosas en la zona.


Es el segundo sistema defensivo más grande del mundo, tiene forma de pentágono y se terminó en el siglo XV junto con sus cuarenta torres y cinco fortalezas.

Ni la hora (mediodía), ni la temperatura (un sol alucinante), ni las ganas (eran entre 0 y nada) acompañaron para animarnos a recorrer la muralla. Así que nos dedicamos a disfrutarla desde abajo y a dar algunas vueltas al pequeño pueblo de Ston.


Para los que tengais ganas de hacer el recorrido, se accede desde el mismo pueblo, una vez pagada la entrada que es de 20 kunas. Recomendable ir con crema solar, gorro, agua abundante y algo para picar.

Después de tomar algo, seguimos nuestra ruta hacia Dubrovnik, el último tramo de carretera es algo más curvado pero pronto divisamos las primeras vistas de la ciudad. Esta parada es casi obligatoria, pues desde ella se pueden divisar los múltiples cruceros que esperan para entrar en la ciudad o los que están ya paraos en espera de los turistas que vuelven de sus rápidas visitas al casco antiguo.



Nosotras nos vamos hacia nuestro camping, la única opción en la ciudad, que es el Camping Solitudo. Tiene unas estupendas instalaciones, una playa privada que requiere de un paseo previo que se hace algo pesado, las piscinas pertenecen al hotel que hay en el mismo complejo y se pueden usar.



Dispone de muchas zonas para ducha y para lavar ropa y pronto descubrimos que dispone también de decenas de abejas. Creo que jamás lo he mencionado por aquí, pero si hay una fobia que me supera son las abejas/avispas/abejorros y todo bicho del estilo. No puedo soportarlas y como buena fobia, hace que haga cosas ridículas como correr sin parar, saltar y gritar, morderme la lengua porque alguien me dijo de pequeña que eso las ahuyentaba, empujar a quien tenga al lado....y en este caso me hizo no socorrer mucho a None cuando se mareaba cortando el pollo de la comida rodeada por decenas de abejas toca narices.


Puesto que la comida, como os podéis imaginar, fue rápida, lo que decidimos fue coger el bus hacia la zona amurallada de la ciudad y empezar a disfrutar del centro histórico, de sus  murallas, sus calles escalonadas, su ambiente de luz tenue que ilumina los edificios, sus museos, sus bares y toda la historia que el centro nos ofrecía.



La diferencia entre las horas donde están los famosos cruceristas y las horas donde los cruceros ya han marchado hace que parezca casi otra ciudad. Si tenéis la oportunidad de visitar la ciudad cuando ya cae la tarde y el volumen de gente es menor; os recomiendo que lo hagáis así.



Si además podéis ver atardecer dentro de esos muros, os lleváis una grata experiencia. 



Para llevaros un gran recuerdo de la ciudad sólo hacen falta vuestras piernas y la paciencia para caminar despacio, sin prisa y sin objetivo diferente al de ir observando sus muros, sus callejuelas, sus pequeños rincones.




Siempre me sorprende el efecto de la luz en la piedra, como esa misma piedra parece un lugar diferente en el día que en la noche y depende de la luz que pongamos parece todavía más envejecido, con más historia, más romántico incluso.




Después de callejear por toda la zona y comprobar que también podíamos hacer un poco el friky con nuestra serie preferida: Game of Trones (apunte: si este blog llega a durar muchos años, cada vez que alguien lea esto que haga el favor de mirar esta serie más allá del capitulo 5....vamos, engancharos a una de las mejores series que podéis ver y decidme si Tyron no es un personaje encantador y decidme si la banda sonora no os pone los peletes de punta)


¿Quién adivina la mítica escena grabada en estas escaleras? Una pistita: shame!
Total que tras esta nueva pateada de la que salimos encanadas, nos decidimos por un restaurante de comida rápida pero con estilo. Unas hamburguesas y bocadillos de pescado excelentes y con una cervecita fresca:  what else!!!!



Kilómetros totales: 149
Precio Camping Solitudo: 49,30€

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